Cambios Legales y Prácticas Culturales en Torno al Consumo de Carne Canina en Asia
La Asamblea Nacional de Corea del Sur tomó una decisión histórica al ilegalizar, a partir de 2027, la cría y venta de perros para consumo humano, una práctica aún común en varios países asiáticos como China, India, Vietnam, Filipinas, Camboya e Indonesia. Este cambio legislativo marca un punto de inflexión en la región, donde se estima que alrededor de 30 millones de perros son sacrificados anualmente, incluyendo unos 10 millones en China y 5 millones en Vietnam. Estas cifras, proporcionadas por la ONG Humane Society International, podrían ser incluso mayores debido al comercio ilegal.
A pesar de estas estadísticas, el consumo de carne de perro no es una práctica generalizada en toda Asia, variando considerablemente en legalidad y prevalencia entre países e incluso ciudades. En China, por ejemplo, la carne de perro se consume principalmente en provincias sureñas, siendo legal en todo el país salvo en algunas ciudades como Zhuhai y Shenzhen. El festival de carne de perro de Yulin, celebrado anualmente en el sur de China, ha atraído críticas internacionales y un creciente rechazo en el país.
En Taiwán, donde anteriormente se permitía el consumo de perro, se estableció una prohibición en 2017, convirtiéndose en el primer país asiático en tomar tal medida. Por otro lado, en Indonesia, la carne canina se consume legalmente en regiones no musulmanas como Célebes o las Malucas. Incluso el expresidente estadounidense Barack Obama mencionó haber probado carne de perro durante su juventud en Indonesia, un hecho que compartió en sus memorias.
El mercado de Tomohon en Célebes, conocido por su comercio de animales exóticos, también tomó medidas para prohibir la matanza y consumo de perros, una decisión replicada en Yakarta y otras ciudades indonesias. En Vietnam, a pesar de las campañas de figuras públicas contra el consumo de carne canina, esta práctica sigue siendo legal en gran parte del país.
Tailandia, por su parte, prohibió la venta y consumo de perro en 2014, aunque sigue ocurriendo de manera marginal en algunas zonas. En la India, el consumo se restringe principalmente a regiones tribales y minorías étnicas en estados del noreste, con intentos gubernamentales de prohibición enfrentando desafíos legales.
Organizaciones de defensa de los animales continúan abogando por la prohibición del consumo de carne de perro en Asia, enfatizando la protección de los animales y la prevención de enfermedades como la rabia y la leptospirosis. La controversia se mantiene, con algunos defendiendo la carne de perro por sus supuestas propiedades terapéuticas o afrodisíacas, mientras que otros ven un cambio cultural con el crecimiento económico y la adopción de perros como mascotas en lugar de alimento.
(Con información de EFE)