El presidente de transición y líder de la junta militar de Chad, general Mahamat Idriss Déby Itno, ganó las elecciones presidenciales del pasado lunes, según los resultados publicados este jueves por la Agencia Nacional de Gestión Electoral (ANGE).
Déby Itno obtuvo el 61,03 % de los votos (3,78 millones) y venció a su principal rival, el exlíder opositor y primer ministro desde el pasado enero, Succès Masra, que logró el 18,53 % (1,14 millones), indicó la ANGE en una ceremonia en el Ministerio de Asuntos Exteriores en la capital, Yamena, blindada con un fuerte dispositivo de seguridad liderado por el Ejército.
Al superar el 50 % del conteo, el general, de 40 años, logró evitar una segunda vuelta de unas elecciones que ponen fin a tres años de transición en el país.
El líder de la junta concurrió a las elecciones al frente de la Coalición Por un Chad Unido, formada por más de 200 partidos, incluido su Movimiento Patriótico de Salvación (MPS).
Succès se había proclamado ganador
Antes de difundirse los resultados, Succès, de 40 años y líder de la formación Les Transformateurs (Los Transformadores), se había dirigido a la nación autoproclamándose ganador de la votación.
“Ganamos el 6 de mayo”, afirmó el candidato, quien alegó que “un pequeño grupo de individuos ha decidido invertir el orden de los números”, en referencia a una eventual manipulación de los resultados.
“Este pequeño grupo se equivoca con los resultados electorales. Todos sabemos que quieren robarle la victoria al pueblo. El pueblo se está levantando y no permitirá que esto suceda”, advirtió Succès, quien contaba con el apoyo de una coalición de más de treinta partidos llamada Justicia e Igualdad.
Más de ocho millones de chadianos fueron llamados el pasado lunes a las urnas para elegir a su nuevo presidente, en una jornada tranquila pese a la muerte de un elector y un soldado por disparos en dos incidentes distintos.
Estas elecciones, en las que compitieron diez candidatos (entre ellos solo una mujer), ponen fin a una transición de tres años desde que el general Déby Itno tomara el poder tras la muerte en 2021 de su padre, Idriss Déby Itno, quien gobernaba el país con mano dura desde 1990, en combates con rebeldes, según la versión oficial.
Desde el fallecimiento de Déby, su hijo se hizo con el poder, anulando la Constitución y disolviendo el Gobierno y el Parlamento.
Nueva Constitución
Déby Itno ratificó el pasado 29 de diciembre una nueva Constitución, considerada clave para la vuelta a un Gobierno civil y aprobada por casi el 86 % de los votantes en referéndum ese mes.
El país celebró entre agosto y octubre de 2022 un diálogo nacional para acordar las bases de la vuelta al orden constitucional, que fue muy criticado y boicoteado por la oposición y grupos rebeldes.
En él, se acordó que Déby Itno fuera investido presidente interino y que la transición, inicialmente prevista para durar dieciocho meses, se extendiera dos años más a partir del 20 de octubre de ese año.
Protestas en Chad
Esa prolongación motivó protestas duramente reprimidas por las fuerzas de seguridad, en las que murieron al menos 50 personas, según cifras oficiales, y 218 según la Liga Chadiana de Derechos Humanos y la Organización Mundial contra la Tortura.
Las elecciones de este lunes no sólo son importantes para Chad, sino también para toda la región y para la comunidad internacional, ya que el Ejército chadiano, uno de los más poderosos del continente, es una pieza clave en la lucha contra el terrorismo en el Sahel.
Además, tras la salida de las tropas francesas forzada por las juntas militares en el poder en Burkina Faso, Mali y Níger en los últimos años y el aumento de la influencia rusa en esos países, potencias occidentales como Francia y Estados Unidos compiten ahora con Moscú por mantener su influencia en Chad.
EFE